miércoles, 2 de mayo de 2012

la educación sexual, una emergencia educativa y social

Hola a todos y todas!

Aquí estoy de vuelta, esta vez para hablaros de la sexualidad, un tema por desgracia aún tabú, no considerado como debería y en las escuelas, aún es la gran asignatura pendiente.
La sexualidad es una capacidad de todo ser vivo para la reproducción, que se supone que es su fin último. Obviamente no solo cumple esta función, sino que el sexo es placer, cercanía y disfrute tanto con el otro como consigo mismo.
Es algo bonito, que se a de disfrutar, huyendo de prejuicios, culpabilizaciones y se a de educar ya desde la primera infancia.

Desde mi propio punto de vista la sexualidad no es lo mismo que el sexo, ya que la primera es una capacidad de cualquier ser vivo para reproducirse y sobrevivir, mientras que el segundo es la expresión de esa capacidad mediante tocamientos, coito o lo que vendría a llamarse relaciones sexuales.
En los humanos esta capacidad no es instintiva, ya que al ser seres sociales, desde pequeños nos educan en unos patrones, creencias y actitudes hacia lo socialmente deseable, hacia lo que no lo es tanto y hacia lo que es mejor.
Esto no siempre es correcto ni veraz, de ahí la necesidad de una educación sexual integral para huir de prejuicios, ideas erróneas, y algo muy importante, de la culpabilización que muchas veces acompaña a actos de tipo sexual.

Esta educación como ya digo, a de comenzar desde que el niño y niña son infantes, y a de ser la familia en primer lugar quien la lleve a cabo, pasando luego a la escuela.
Digo lo de la escuela, porque la educación sexual familiar puede estar sesgada por creencias y falsos conocimientos, o incluso ideas negativas entorno al tema o lo que es para mí más grave, pretender ocultárselo al niño o niña porque según la familia no tiene necesidad de ello y cuando sea adulto, ya lo aprenderá.
Esto es un grave disparate, de dimensiones colosales. O sea que si a un niño o niña no le instruimos y hablamos del sexo en casa, formas de este, anticoncepción y prácticas sexuales cuando es pequeño o adolescente, no pretenderemos que al ser adulto esto lo aprenda con varita mágica!
Porque digámoslo de paso, vaya aberraciones que se han hecho con este tema en muchas familias!
Desde prohibir a sus pequeños ir solos al baño para que no se masturben, azotarlos cuando lo hacen, no querer que vean en la televisión escenas heróticas, hasta no mencionar el tema para nada como si se tratase de algo horrible, feo o sucio.
Esto me da una gran pena, entre otras cosas porque soy profesional de la docencia, he cursado una asignatura de educación sexual, y creo que es algo de lo que todos y todas nos tenemos que sentir orgullosos, ser tolerantes hacia ello y receptivos con su educación, y ni mucho menos prohibirlo o considerarlo como algo pecaminoso.
Pero lógicamente este origen de estas nefastas ideas está en la religión, que tanto daño ha hecho a la sociedad y a las personas…..

La sexualidad es algo que a de tratarse en la escuela, huyendo de las restricciones que en ocasiones supone el contexto familiar.
La escuela en este aspecto para mí actúa incompletamente, aunque se quiera dar a entender que la sexualidad forma parte importante de las materias y áreas curriculares.
Aún nos queda mucho para avanzar, ya que a mi juicio la sexualidad aún sigue siendo la cenicienta en el currículum, introduciéndose tímidamente mediante un par de vídeos, un par de charlas, y dos o tres temas de conocimiento del medio y dos o tres también en naturales.
Esto no a de ser así, ya que es algo incompleto, vacío de coherencia y algo importante, no se corresponde ni mucho menos con la realidad del mundo actual y la que los niños y niñas demandan saber, conocer y analizar.
En la sociedad actual cada vez más por fortuna, el sexo está muy presente a edades cada vez más tempranas, en las vidas de los más pequeños.
Ven dibujos animados con escenas aunque no sexuales, si que tratan el tema encubierta, juguetes con contenido sexual, y algo muy importante, la propia curiosidad infantil sobre el tema.
Que esa es otra, no sé porqué razón, hay personas que ya dan por supuesto que los niños y niñas no se interesan por esto en absoluto!
Los niños y niñas se introducen en el sexo mediante juegos, mediante sus fantasías, y cuando ya son más adolescentes, mediante su deseo sexual y encuentros con el otro.
Esto de que nos habla?
Pues muy sencillo, el sexo es algo inherente a la especie humana!
Y como tal, no se debe ni de prohibir, ni de considerar obscenno ni mucho menos, ignorar.

La educación sexual en la escuela a de hacerse desde preescolar, hasta que el chaval sea adolescente.
En preescolar se debe introducir las partes anatómicas, el concepto chico-chica, no como algo que resalte las diferencias, sino como algo que se necesitan el uno del otro, algo complementario y desde luego, como dos personas que son libres cada cual, independientes y han de respetarse y quererse.
Se a de huir de prejuicios tales como el chico es más fuerte que la chica, la chica se pinta y el chico no, o la chica juega con muñecas y el chico con pistolas y camiones.
Esos prejuicios son absurdos, forman parte de una realidad social que ya no existe, y son puramente artificiales, algo como un invento o convención social para crear desigualdad y justificar aberraciones como la violencia de género o la sumisión de la mujer ante el hombre.
Algo muy mal que se suele hacer en esta etapa y que yo he observado a través de conversaciones con niños y niñas pequeños, es insistir mucho en que el hombre tiene pene y la mujer no.
Esto es como dotar al hombre de cualidades sobrehumanas solo por tener pene, lo cual aunque los profesores y familia no lo crean, va impregnando en los pequeños la idea de superioridad masculina, que a las mujeres nos falta algo o que el hombre es mejor y más capaz que la mujer.
La frase correcta de una buena educación sexual sería “el hombre tiene pene, la mujer vagina2”.
Así se destaca que ambos tienen sus partes anatómicas y órganos sexuales, que aunque son diferentes, ambos se complementan.

Esta educación sexual se podría hacer mediante juegos de rol, vídeos de dibujos animados, experiencias manipulativas para los pequeños de tocar modelos anatómicos y experimentar con ellos, y muchas otras, las cuales según yo creo, no se están llevando a cabo y su ausencia limita mucho el conocimiento sexual imprescindible para un desempeño social óptimo, para construir una identidad y para tener una información necesaria en esta sociedad tan compleja.

Por supuesto tampoco me olvido del tema de la masturbación infantil.
Para muchos moralistas y religiosillos esto es el mal de males!
No lo entiendo, ya que cada uno es libre de hacer con su cuerpo lo que le convenga, disfrutar de él a su manera, y sobre todo orientar las prácticas sexuales hacia el máximo placer posible.
No nos olvidemos de que el cuerpo es lo más nuestro que tenemos, por ello cada cual a de hacer lo que considere oportuno con él, siempre y cuando claro, no dañe a otros!
La masturbación es una conducta normal, que forma parte de las prácticas sexuales de muchas personas, mediante la cual conocemos nuestro cuerpo y nos conocemos sexualmente.
Es algo bonito ya que permite explorar la energía sexual de cada cual, dar rienda suelta a la fantasí e imaginación y disfrutar como a cada cual le parezca mejor.
Se debe enseñar al niño y niña a masturbarse en la intimidad y a disfrutar lo máximo de esta práctica, y algo muy importante, no inculcarle la idea de que es algo obsceno o de lo que han de sentirse culpables.
Se les enseñará que es la forma más personal de explorarse a uno mismo y que si la vida sexual con el otro está limitada por alguna circunstancia, siempre está tu propio cuerpo para la satisfación y el placer.

En primaria esta educación a de continuar y a de orientarse a conocer su cuerpo, el del otro y las formas de expresión de los afectos.
Esto se podría llevar a cabo mediante talleres experimentales, role playing, y visitas por ejempo aalgún museo o exposición que tratase el tema.
Aquí los niños y niñas ya empiezan a querer jugar al sexo, hacen muchas preguntas sobre todo de cómo vienen al mundo sus hermanitos o como lo hicieron ellos mismos, o lo que sus papás y mamás hacen en la cama.

Esta educación sexual a mi juicio debería ser una asignatura, y tener gran peso en la docencia y en el currículum.
Siempre estaría coordinada con la familia para instruir a esta en la mejor forma de afrontar esta cuiriosidad de sus hijos e hijas, como tratar el tema en casa y hacerles ver que es algo normal de lo que sus hijos e hijas tiene necesidad de conocer y aprender.

Así según mi punto de vista se evitarían muchas cosas desgraciadas que han ocurrido en la historia y siguen ocurriendo, como la violencia de género, las violaciones a mujeres, las agresiones sexuales y muchas otras conductas despreciables e injustificadas.
No nos olvidemos de que los niños y niñas generalizan todo lo que aprenden en la escuela, y si existe coordinación entre esta y la familia, mejor será esta generalización y más completa será su educación y aprendizaje.

Llega la adolescencia, una etapa crítica y hermosa para la sexualidad!
La etapa del deseo de encuentros sexuales, en la que empiezan a senntir atracción por el otro, y en la que por ello, la información a de ser práctica, completa e integral, no vasta con dos sesiones de tutoría al mes que traten el tema, o con una charla en el curso en la que asista una miembra de planificación familiar a hablarles en el instituto de lo peligrosísimo de las prácticas sexuales por aquello de las enfermedades de transmisión sexual como SIDA o la hepatitis B.
Además, estos adolescentes ya empiezan a salir de marcha, y empiezan a practicar sexo sin suficiente conocimiento de anticoncepción.
En esta etapa es importante resaltar el respeto mutuo por el otro, que las prácticas sexuales han de requerir un control no en su ejecución, sino en su forma, evitando riesgos innecesarios para uno mismo y para los demás.
A mí me da mucha rabia el hecho de que siempre se resalte el tema de los riesgos, en vez de dotarte de conocimiento e información para no correrlos.
Yo esto lo he visto en mí. Tanto en el colegio como en el instituto la educación sexual que tuve fue buena pero insuficiente, y no fue hasta la universidad cuando me matriculé en la asignatura de educación afectivo-sexual, cuando me empecé a enterar de todos los métodos anticonceptivos, clasificación correcta, forma de aplicarlos, etc.
Me parece bien que se les hable a los jóvenes de las ETS, pero no para crearles un terror hacia el sexo, sino que se debería abordar de un modo más práctico dotándoles de conocimiento y prevención, y más experimentación sobre anticoncepción y beneficios de la misma.
Sería este el momento de proponer visitas a un sexshop para que los adolescentes viesen las múltiples variantes que puede tener el sexo, desde hacerlo consigo mismo, hasta con más de una persona.
También sería bueno en vez de ir alguien de planificación familiar al instituto, llevarlos a ellos a que viesen, preguntasen y se informasen para luego cuando salgan de marcha o practiquen sexo, puedan hacerlo de forma segura, placentera y feliz.

Algo muy importante que todos y todas las profesoras deberían tener en cuenta, es desligar sus propias ideas de aquello que está en la sociedad, y por ello no condicionar ni sesgar las ideas y sentimientos del alumnado en relación al sexo y la sexualidad.
Con esto quiero decir que si un profesor o profesora es muy regioso a mí me parece genial que lo sea, pero que no por ello limite el aprendizaje sexual de sus alumnos y alumnas, les transmita ideas personales como universales y sepa afrontar que el alumnado independientemente de sus ideas y creencias, tiene derecho a una educación sexual integral y global.

Una práctica muy bontia que se me ocurre para adolescentes en este sentido sería escribir sus sueños en un papel y luego comentarlos en clase para conocerse a sí mismo, sus deseos y fantasías, y apreciarlos como positivos y fructíferos.

Los valores que deberáin regir para mí toda educación sexual desde su inicio serían el respeto por la propia persona y por el otro, ver la sexualidad como algo bonito y que tiene múltiples expresiones y formas e informar sobre riesgos, anticoncepción y enfermedades de transmisión sexual.

Esto es una realidad y desde la escuela no se debería pasar por alto.
La sexualidad forma parte desde que nacemos de nuestra vida personal y social, nos constituye como especies y nos ayuda a conocernos a nosotros mismos y a otras personas que forman parte de la sociedad y del mundo en que vivimos.
Por ello existe una gran necesidad de incluir esta educación en el currículum pero no de forma transversal y tímida, sino con todo el peso que le corresponde a algo tan complejo, bonito e integral como esto: nuestra vida sexual.

No hay comentarios:

Publicar un comentario